La mayoría de soldadores confía en los trabajos que hacen cuando usan una soldadora inversora de calidad y consideran los parámetros y recomendaciones aplicables a un proceso específico de soldadura; sin embargo, es importante realizar inspecciones para garantizar la calidad de los trabajos.
¿Por qué es importante?
Cuando hablamos de inspección de soldadura, nos referimos a la comprobación de la capacidad de los cordones para soportar las fuerzas a aplicar, algo crucial cuando se trabaja con estructuras de construcción. Consiste en corroborar su calidad y verificar si se adecúan a las necesidades estructurales de una obra. Abarca varias técnicas que valoran las dimensiones y ubicación de las soldaduras y detecta problemas reparables según su tamaño y tipo.
Hay varias razones para realizar las inspecciones, por ejemplo, determinar si el trabajo realizado con la soldadora inversora está bien hecho. Ello requiere considerar algunos parámetros que ayudan a comprobar la calidad de las uniones y que se obtienen de normas y códigos relacionados con la soldadura. Otro nombre que reciben es «niveles de aceptación» y varían según la finalidad del trabajo.
Realizar las inspecciones no es algo fácil y requiere personal ampliamente capacitado que conozca no solo los conceptos y procesos de soldadura, sino que esté formado y tenga experiencia en las pruebas, tipos de defectos y problemas comunes en los trabajos de soldadura, entre otros aspectos. Requiere igual conocimientos de las técnicas de inspección y capacidad para determinar cuál es la más conveniente según el caso.
Las técnicas más usadas son las siguientes:
Inspección visual
Se trata de la técnica más barata y fácil de aplicar. Se realiza en todos los cordones y antes de aplicarse el resto de las técnicas. Implica varios aspectos, como la determinación de la condición superficial, alineación adecuada de superficies acopladas, protección de piezas, comprobar grado de acabado de las soldaduras, buscar presencia de poros, grietas, falta de penetración, exceso de espesor, entre otros.
Prueba de partículas magnéticas
Se trata de un ensayo no destructivo que revisa la presencia de fisuras en las soldaduras u otros problemas superficiales o no visibles. A diferencia de la prueba de líquidos penetrantes, no es muy versátil, ya que no es aplicable en nudos difíciles.
Prueba de líquidos penetrantes
Es otra técnica no destructiva para corroborar la existencia de grietas en las uniones u otros defectos superficiales. Destaca por su versatilidad, ya que es aplicable a cualquier tipo de unión.
Pruebas mediante radiografías y ultrasonidos
Abarca dos técnicas no destructivas recomendadas para hilos de gran espesor y uniones a tope. Es muy útil para detectar cualquier defecto, ya sea profundo o superficial.
Pruebas destructivas
Implica la extracción de probetas de chapa-soldadura-chapa mediante corte para determinar sus propiedades químicas y mecánicas en laboratorios.
Elijan la soldadora adecuada
Las técnicas de inspección de soldadura son muy útiles para detectar los defectos en las uniones, pero lo más importante es contar con un equipo adecuado para evitarlos. Consideren los siguientes puntos para comprar un equipo o reemplazar su soldadora existente y garantizar trabajos de calidad:
Procesos
Los tres principales procesos de soldadura son los siguientes:
- TIG.
- MIG.
- MMA.
Cada uno posee ventajas y limitaciones y un rango específico de aplicaciones. En cualquier caso, se recomienda usar una soldadora inversora y no un equipo con transformador, ya que son más estables, compactos, presentan menor consumo y trabajos de mayor calidad.
Materiales por trabajar
Según los metales a unir, se recomiendan los siguientes procesos de soldadura:
- Para el aluminio y bronce se recomienda TIG, aunque el equipo debe operar a alta frecuencia y en corriente alterna, debido a que el aluminio es un material difícil de soldar.
- Para el hierro conviene cualquiera de los tres procesos.
- Para acero inoxidable se recomiendan MIG y TIG.
Experiencia y espesores
La soldadura MIG es ideal para soldadores con poca experiencia, ya que puede trabajar sin tubo de gas, en cambio, la soldadura TIG requiere asesorías, debido a que es necesario usar un manómetro y tubo de gas. Si trabajarán con chapa fina, tanto la soldadora MIG como TIG funcionan, aunque es importante contar con un electrodo fino. En el caso de espesores grandes, cualquier proceso es una buena opción.
Ciclo de trabajo
Usualmente se considera solo el amperaje, pero es importante considerar otros aspectos. Sin importar el tipo de proceso a elegir, es necesario elegir un ciclo de trabajo adecuado, que consiste en el porcentaje de tiempo que el equipo opera en un lapso de diez minutos. Por ejemplo, un ciclo de trabajo de 90% indica que la soldadora opera ocho minutos de forma continua y requiere un reposo de dos minutos.
Alimentación eléctrica
La tecnología inverter soluciona el viejo problema de alimentar las soldadoras desde redes domésticas. Su consumo es de 2 kW o menos y bastan 16 A para alimentarla. En el caso de los equipos TIG y MIG, consumen desde 3kW o más según las uniones a realizar. Para alimentaciones eléctricas con restricciones, no convienen soldadoras de menor amperaje.
Si desean una soldadora que realice cualquiera de los tres procesos u otros equipos, como la cortadora de plasma, contáctennos al (222) 570 2046 o llenen con sus datos el formulario disponible en nuestro sitio web.